martes, 13 de abril de 2010

Contracorriente

Ir contracorriente siempre ha sido un trabajo duro y con frecuencia mal entendido. Si te escapas del "rebaño" eres señalado y nadie va a dedicar unos segundos de su tiempo a analizar el por qué de esa actitud rebelde o contestataria.Como decía Emily Dickinson:
Asiente, y te considerarán cuerdo.
Disiente, y de inmediato serás peligroso
y atado con cadenas.