Un momento; un minuto y treinta segundos (los romanos siempre parcelando).
Sin embargo yo prefiero los instantes...así, libres, anárquicos, sin encorsetar. Vivir enhebrando instantes dulces, tristes, brillantes, amargos, sensuales, felices, oscuros, profundos, simples, excitantes. Con pasado, sin futuro, en presente. Deseosos, frustrados, intentados, logrados, fracasados...pero todos plenos, llenos...repletos de dos...
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