El destino ha tenido y tiene varias interpretaciones a lo largo de la historia y en las diferentes culturas. Tiene por tanto múltiples interpretaciones y elaborar una única es un trabajo, de antemano, casi imposible.Sin embargo, ¿quién no ha hablado alguna vez del destino?
Unos opinan que nada está marcado, que cada individuo es libre de construir su propio destino a través de las decisiones que toma a lo largo de su vida. Pero ¿qué le induce a escoger un camino y no otro?, ¿es que está predestinado a tomar esa decisión, una única decisión y ninguna de las otras que se le presentan?
Del mismo modo que nada se crea de la nada, ¿es que las cosas pueden darse por azar, por pura casualidad? Si todo tiene una causa, y es algo en lo que creo firmemente, es que estaba predestinado desde el momento que surge la causa. Un ejemplo, este año mi trabajo dio un giro inesperado, algo con lo que no contaba. Aunque lo que me habían reservado no era lo que quería, el pesimismo y la angustia me invadieron de tal forma que creí que mi destino estaba marcando el rumbo de mi vida por otros caminos, que yo, desde luego, no había elegido. Pero una amiga me llamó y me dijo: "Todo ocurre por algo, no lo olvides nunca y si ha dado ese giro, estoy segura de que es porque algo mejor te está aguardando; todo está escrito".
Y algo mejor me aguardaba, estaba ahí, esperándome a mí.
En la vida se pueden presentar muchos caminos por los que llevar a cabo tu andadura, pero elegimos uno y no otro, entre todas las opciones que se presentan, caminamos por uno, sólo por ése. Puede que existan muchas bifurcaciones pero tú siempre, de forma no sé si consciente o inconsciente te decides por uno. ¿Todo está escrito desde el mismo momento en el que naces? Quizás está escrito desde mucho antes de ser engendrados.
Esto me lleva a recordar "El complejo de Edipo": "Un oráculo anunció a Layo, rey de Tebas, que los dioses le castigarían por sus pecados. Si algún día tenía un hijo, éste mataría a su padre y se casaría con su madre. Layo intentó durante un tiempo no tener hijos, pero el único método anticonceptivo disponible en aquella época exigía una férrea disciplina…, y no se pudo aguantar. En una borrachera, dejó embarazada a su esposa Yocasta. Ni corto ni perezoso, entregó a su pequeño Edipo a un pastor para que lo abandonara en el bosque. El pastor se apiadó, lo entregó a unos padres adoptivos y Edipo se hizo hombre. Ignorante de su origen, mató a su padre en una pelea y se casó con su madre".
Para los antiguos griegos, probablemente la moraleja de la historia era algo así como «no puedes escapar al castigo de los dioses, hagas lo que hagas te encontrarás con tu destino.
Y tal y como dice Jean de la Fontaine en una frase que yo comparto plenamente, porque creo que nada puede definir mejor lo que pienso: "A menudo encontramos nuestro destino por los caminos que tomamos para evitarlo".

2 comentarios:
decía Victor Hugo, que el porvenir, está en manos de los maestros de escuela... como no quiero darte tanta responsabilidad y estando también plenamente de acuerdo contigo, solo me queda decir una de mis citas favoritas: El destino baraja sus cartas, nosotros las jugamos...
Nota: no se que pasa a mi blog, que no me deja publicar nada.... grrrr
Agradezco que no hagas reposar sobre mis hombros tanta responsabilidad...y qué mal juegan las cartas algunos, verdad?
Tu blog está como el tiempo...da cambio para mañana.
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